Todas las residencias universitarias tienen sus particularidades, y es que no todas son iguales, cada una de les residencies universitaries en Barcelona cuenta con unos beneficios o ventajas que se incluyen dentro de la cuota mensual que se abona durante todo el curso académico. Pero es obvio que las residencias universitarias no son únicamente un espacio en que el estudiante se podrá alojar y podrá estudiar durante el curso académico, una residencia es mucho más.
Una buena residencia, un buen alojamiento para el estudiante, debe ofrecer un valor añadido, y ese valor es el completo desarrollo de las capacidades sociales, de interacción y de participación en actividades. En la residencia universitaria Sarrià saben perfectamente lo importante que son los años en los que un alumno realiza sus estudios universitarios, ya que se trata de una importante época en la que se adquieren todos los conocimientos y capacidades necesarias para poder enfrentarse en un futuro al mundo laboral.
Para conseguir todo ello es clave que los alumnos que se alojen en un residencia donde interacción con otros estudiantes como él, con sus mismas inquietudes, gustos, forma de pensar, etc. Es por este motivo que en la residencia universitaria Sarrià promueven las relaciones sociales entre los estudiantes a través de actividades de especial interés, tanto actividades deportivas como actividades de otra índole.
La residencia no son un mero edificio en el que dormir y estudiar, tu residencia se debe convertir en un puerta de entrada al desarrollo personal y aumento de la interacción social, algo que aporta una residencia universitaria como la de Sarrià, un gran valor añadido, ya que no todas las residencias tienen la capacidad de lograr desarrollar en los estudiantes este tipo de capacidades tan fundamentales a lo largo de la vida, las relaciones sociales a nivel personal y profesional.